La nariz es el elemento central de la cara. Su forma y tamaño pueden complementar la belleza de un rostro o por el contrario opacarla. La rinoplastia es una cirugía mediante la cual se realiza la modificación de la nariz para lograr:

• La disminución o el aumento del tamaño o ancho nasal.
• Cambiar la forma de la punta o del dorso.
• Estrechar los orificios nasales.
• Modificar el ángulo entre la nariz y el labio superior.
• Corregir problemas congénitos, traumáticos y algunos problemas respiratorios.

Se realiza casi siempre bajo anestesia general, de manera ambulatoria y preferiblemente después de los 15 años de edad, que es cuando se ha culminado casi en su totalidad el crecimiento facial. Su duración es de 2 horas aproximadamente y es posible recuperarse en un promedio de ocho días.

Dependiendo del tipo de nariz y la remodelación que requiera realizarse se practicará una rinoplastia por técnica abierta o cerrada. La utilización del láser e instrumentos de alta tecnología en esta cirugía mejoran los resultados y la cicatrización, permitiendo al paciente una recuperación rápida y un mejor manejo de las posibles molestias, evitando el uso de los incómodos tapones nasales.

En esta, como en las demás cirugías, deben ser valoradas las características generales de la cara del paciente para lograr no solo una bonita nariz sino una cara estéticamente armoniosa, por esto el cirujano plástico en la consulta crea la rinoplastia apropiada para cada paciente considerando su estructura ósea y su apariencia general.

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